El papa Francisco hacía hoy su recorrida habitual por la Plaza San Pedro antes de la audiencia general de los miércoles cuando divisó entre la multitud de fieles a un cura amigo y compatriota argentino y no dudó en hacerlo subir al papamóvil en el que él se trasladaba.
El párroco argentino Fabián Baéz fue invitado por el pontífice a subir al papamóvil, un vehículo especial descapotable. Los dos conversaron durante el trayecto.
Según recogieron los medios italianos, Francisco pidió parar el coche antes de la audiencia para pedir al religioso argentino, párroco en una iglesia del centro de Buenos Aires, que lo acompañara en el recorrido previo a la audiencia general que celebra todos los miércoles. «Es un gran confesor», dijo el papa argentino refiriéndose al párroco Fabián Báez.
Fuente: Agencias
