Al menos 47 estudiantes murieron este lunes cuando una bomba detonó durante una asamblea escolar en la ciudad de Potiskum, en el noreste de Nigeria.
La explosión sucedió en una escuela de varones de ciencia y tecnología de la localidad.
Se sospecha que el ataque pudo haber sido perpetrado por Boko Haram.
El grupo militante frecuentemente ha atacado escuelas durante su campaña de cinco años para establecer un estado islámico, que ha dejado miles de muertos.
Las víctimas han sido llevadas a un hospital cercano, según un maestro que pidió no ser identificado.
Educación «prohibida»
Informes de testigos citados por la agencia AP indican que el atacante que causó la explosión iba vestido con el uniforme del colegio.
El portavoz de la policía, Emmanuel Ojukwu le dijo al Servicio Hausa de la BBC que la explosión también dejó a 79 personas heridas.
«Los estudiantes se habían reunido para la asamblea matutina cuando algo explotó en medio de ellos provocando un sonido estruendoso a las 7:50 de la mañana» le dijo a la agencia AFP el maestro que pidió no ser identificado.
Un testigo le dijo a la BBC que vio a padres llorando frente a los cuerpos de sus hijos en en el hospital.
La explosión pone de manifiesto la falta de seguridad en el noreste de Nigeria, asegura el corresponsal de la BBC en ese país, Will Ross.
Boko Haram, cuyo nombre significa «la educación occidental está prohibida», sostiene una campaña de violencia para evitar que los niños y adolescentes asistan al colegio.
La agrupación cree que las niñas no deben asistir a la escuela y que los niños sólo deben recibir educación islámica.