NATAL, Brasil – Cuando Uruguay tenía un pie en el avión, un cabezazo de Diego Godín a los 81 minutos le dio el martes un triunfo 1-0 sobre Italia y clasificó a la «Celeste» a la segunda ronda de la Copa del Mundo.
Por segundo partido consecutivo, Uruguay se embolsó los tres puntos al amparo de un gol en el tramo final de un partido, y eliminó a Italia en la primera ronda de un Grupo D que ganó Costa Rica.
Los uruguayos parecía que se despedían del torneo frente al catenaccio italiano, aplicado otra vez para un partido de vida o muerte, y la brillantez del portero Gianluigi Buffon.
Tras un letárgico comienzo, seguido por un tenso trámite, el partido acabó de manera trepidante.
La expulsión de Claudio Marchisio a los 59 minutos, tras ir temerariamente con los tacos de frente en un lance con Egidio Arévalo, le dio al final una cuota enorme de dramatismo. El árbitro mexicano Marco Rodríguez no titubeó en mostrarle la tarjeta roja al volante italiano.
Obligado a ganar para con vida, Uruguay se volcó al ataque en procura del gol de la diferencia. Y lo encontró tras un tiro de esquina cobrado por Gastón Ramírez y cabeceado por Godín.
Antes, Buffon se había lucido con una serie de intervenciones para sacar goles cantados ante remates de Luis Suárez.
Mordida de Suárez
Suárez pareció morder a Giorgio Chiellini durante el partido cuando cayeron al suelo en el área italiana alrededor de los 80 minutos, y en las repeticiones de televisión se pudo ver al delantero de Uruguay aparentemente morder el hombro izquierdo de Chiellini.
El zaguero italiano reclamó ante el árbitro Rodríguez abriéndose el cuello de la camiseta para mostrarle la mordida en el hombro, pero el mexicano no tomó medidas. Suárez, por su parte, se agarró los dientes, haciendo gestos de dolor.
Poco después, Godín anotó de cabeza para el triunfode los sudamericanos.
Suárez ha sido suspendido dos veces en su carrera por morder oponentes, primero cuando jugaba con el Ajax en la liga holandesa, y luego con Liverpool en la liga Premier.
Fuente: AP