Atención a esto, la Real Academia de la Lengua Española eliminó oficialmente las letras “CH” y “LL” del abecedario español. Eran consideradas como de éste desde 1754, pero ahora formarán parte de los dígrafos, o combinaciones de dos letras.
Este cambio aparecerá en la nueva edición de “Ortografía”, que se publicará a fines del año.
Otros cambios importantes son los nombres de algunas letras. En el caso de la “Y” (i griega) será considerado solamente como “ye”. De igual forma, la letra “i” ya no deberá ser llamada “i latina”, sino solamente “i”.
Por otra parte, los nombre “be grande” y “be chica” dejarán de ser empleados y, en todo caso la “B” larga como decimos en el país, sólo será llamada “be”, y la letra conocida como “V” corta, solo deberá llamarse “uve”.