La muerte de un niño de cuatro años por ahorcamiento, ha desencadenado indignación y dolor en los familiares y vecinos de la calle Capotillo en el sector que lleva el mismo nombre, donde sus moradores exigen justicia.
El niño Alexander Ranciel Valdéz, estaba bajo los cuidados de su abuela Miguelina Santana, Relata que el infante salió de la casa a las cinco de la tarde y tras cuatro horas de búsqueda fue encontrado colgando de un cable de teléfono en el patio trasero de una casa situada justo al lado de su residencia.
Madres desesperadas exigen a las autoridades investigar a fondo las causas de su muerte, y dar con el verdadero culpable de este hecho atroz. La familia y allegados a esta descartan que el infante se suicidara.
La situación es inusual, ya que según cuentan la abuela y vecinos, la familia no tiene enemigos.
Por el hecho la policía apresó al padre de la víctima identificado como Arismendi Basora, y a otros hombres que ayudaron a sacar el cuerpo sin vida del pequeño.