La XIII convención del Partido Revolucionario Independiente (PRI) terminó este domingo entre los forcejeos y puñetazos que se propinaron los miembros de las dos facciones en la que se encuentra dividida la organización.
Los miembros de la facción oficialista del PRI que encabeza Trajano Santana y las del aspirante a dirigir la organización Julio Jiménez, se enfrentaron con bates, sillas, puñetazos y todo lo que encontraron a su alcance.
Ambos grupos se contra acusan del desorden.
La asamblea en la que se esperaba la adopción de importantes decisiones para el futuro inmediato de la organización, fue deslucida por los disturbios.
Cada quien terminó realizando su propia reunión, en el mismo salón pero en momentos distintos.
Como era de esperar también los resultados de las sendas asambleas fueron opuestos.
Agentes Policiales junto a la seguridad del hotel donde fue celebrado el evento tuvieron que intervenir para controlar a los revoltosos.
Esta actividad fue convocada para las 10 y 30, pero fue adelantada a las 9 de la mañana.
